INDICACIONES
Esta indicada para pacientes de ambos sexos que desean mejorar su contorno y forma corporal; es necesario estar en buenas condiciones de salud por lo cual se debe realizar el estudio prequirúrgico pertinente indicado por su cirujano plástico y una consulta inicial que sirva para aclarar las expectativas que del procedimiento se tienen con su cirujano plástico.
Es paciente ideal es aquel que presenta un peso relativamente normal o un sobrepeso moderado, que está psicológicamente estable y que tiene expectativas reales acerca del resultado de la cirugía.
La firmeza y buena elasticidad de la piel son importantes en los resultados, especialmente en el abdomen y cara interna de los muslos. En estas zonas, es donde la piel suelta o flácida puede exigir la realización de procedimientos adicionales tales como dermolipectomia y resección de excesos cutáneos.
Este procedimiento ayuda a la mejoría de la alteración cutánea conocida como “celulitis” aunque no es garantía de desaparecerla.
RIESGOS
La lipoescultura presenta riesgos comunes a otras cirugías tales como hematomas, infecciones, seromas, complicaciones anestésicas y en muy raras ocasiones la posibilidad de embolia grasa pulmonar. Habitualmente es un procedimiento seguro, siempre que el paciente haya sido adecuadamente evaluado previamente con todos los estudios adecuados por un cirujano plástico calificado. La intervención debe ser realizada por un cirujano plástico, en un lugar que cuente con los equipos y adecuadas condiciones operatorias para reducir al mínimo las posibilidades de complicaciones.
Es posible que se presenten alteraciones de la piel, como decoloraciones o irregularidades en su superficie. Las asimetrías de ser notorias, podrían eventualmente necesitar revisiones posteriores que son procedimientos de menor envergadura y duración.
PLANEACIÓN DE LA CIRUGÍA
Se debe realizar una marcación preparatoria definiendo las áreas de extracción y las áreas de relleno de común acuerdo con la paciente donde se le escuchan sus deseos y se le aclara lo que se puede obtener con la cirugía. Se realizara un lavado general del paciente antes de la cirugía para poder realizar el procedimiento en un ambiente estéril.
PREPARACIÓN PREVIA
En casos muy excepcionales el cirujano puede considerar que es posible que se extraiga sangre antes de la cirugía, para autotransfundirla después de la lipoaspiración. De este modo se corregirán las pérdidas producidas durante la cirugía, sin necesidad de usar sangre de otras personas.
Es importante tener en cuenta que las grandes liposucciones están asociadas con algunas complicaciones importantes por lo que nosotros no las consideramos un procedimiento ideal.
TÉCNICA ANESTÉSICA
La lipoaspiración es realizada en forma ambulatoria o con hospitalización variable de un día en casos excepcionales. Ello dependerá de la extensión del procedimiento y del tipo de anestesia requerido.
La anestesia ideal en este de tipo de cirugía es la peridural que mantiene insensible el área del cuerpo a trabajar, agregándose una sedación para tranquilidad y confort. En algunos casos excepcionales se requiere de anestesia general ya sea por indicación médica o deseos del paciente
TÉCNICA QUIRÚRGICA
Previo a la extracción de la grasa es infiltrado en el área a trabajar una solución que favorece el despegamiento de la grasa y su extracción así como produce un fenómeno de vasoconstricción que conlleva a disminución del sangrado; la grasa ahora es removida, empleando un tubo metálico fino, que se introduce a través de la piel por incisiones mínimas de dos a cuatro milímetros. Este tubo se llama “cánula de lipoaspiración”. La aspiración se hace conectando las cánulas a un motor especial o a jeringas apropiadas para producir un potente vacío.
El cirujano manipula la cánula a través de las distintas capas de grasa para soltarla y facilitar su succión. Se pude también realizar con técnicas de ultrasonido externo o interno.
Estas cirugías tienen una duración muy variable según la extensión del área lipoaspirada. El tiempo requerido puede ser de 1 hora a varias horas con un promedio de dos horas.
El paciente saldrá de la sala de cirugía con una venda compresiva de lycra que nos ayudara al moldeamiento cutáneo así como para evitar hemorragias y seromas postoperatorios.
RECOMENDACIONES POSTOPERATORIAS
Al terminar la lipoaspiración, se usarán curaciones compresivas, generalmente con faja de lycra, que deberán mantenerse por uno o dos meses. El dolor postoperatorio generalmente no es importante y responde bien al vendaje que ayuda a disminuirlo así como a los analgésicos convencionales.
Las áreas lipoaspiradas, inicialmente pueden verse hinchadas y amoratadas, a la vez que sensibles durante algunos días. También es posible perder la sensibilidad en algunas zonas de la piel, lo que habitualmente es transitorio.
Lo anterior, puede afectar emocionalmente a la persona operada. En unas semanas se vuelve a la normalidad y el paciente aprecia los beneficios del procedimiento realizado.
Los puntos de las pequeñas incisiones por las que se introducen las cánulas, se retiran entre los siete y diez días. Se reanudan las actividades gradualmente no haciendo esfuerzos físicos importantes hasta 1 mes luego de la cirugía. Durante este período hay controles periódicos con el cirujano plástico, para vigilar que todo marche adecuadamente.
La aplicación de drenajes linfáticos y ultrasonidos facilita la descongestión de las áreas lipoaspiradas así como disminuyen el edema y dolor postcirugia y se indican habitualmente a los 5 a 7 días de la cirugía.
PERMANENCIAS DE LOS RESULTADOS
La lipoaspiración es una técnica muy efectiva para corregir el contorno corporal, con mínimas cicatrices. Sus resultados en cuanto a forma corporal son generalmente de carácter permanente.
Si no hay un adecuado control en la alimentación, siempre es posible ganar peso, pero sin que ello produzca nuevamente los depósitos de grasa que motivaron la cirugía. Esto significa un resultado muy satisfactorio en la gran mayoría de los pacientes